La nueva Ley de Alquileres comienza a regir desde este martes y establece que los contratos de alquiler suscriptos a partir de la fecha deberán tener un plazo mínimo de tres años y prever una actualización cada seis meses.
La nueva normativa, que se toma para aquellos alquileres que se concreten desde este martes 18 de octubre, consiste en una modificación de Código Civil y Comercial de la Nación en la cual se mantiene la duración de tres años para los contratos de alquiler.
Además, la nueva norma, prohíbe fijar valor de los alquiles en dólares o cualquier otra moneda que no sea el peso nacional. Esta medida es muy importante para la estabilidad de los argentinos y las argentinas porque en el último tiempo se impuso el pago en moneda dólar como una práctica común. A partir de ahora, pagar en dólares está prohibido.
Los ajustes ahora podrán realizarse en intervalos no inferiores a seis meses, en lugar del mínimo de un año que estipulaba la normativa de 2020 y el plazo de entre cuatro y 12 meses que establecía el proyecto original aprobado en Diputados. Es decir, los inquilinos tendrán dos incrementos de precio al año en lugar de uno.
¿Cómo se establecen los aumentos del alquiler? El mecanismo de aumento utilizará como criterio “un coeficiente conformado por la menor variación que surja de comparar el promedio del 0,9 de la variación del coeficiente de variación salarial publicado por el Indec y la variación del Coeficiente de Estabilización de Referencia (CER), publicado por el Banco Central”, es decir que tendrá en cuenta el menor indicador entre el promedio de variación salarial del último año y el promedio de la inflación del mismo período.
En los últimos dos años, el coeficiente Casa Propia se ajustó siempre por salarios (CVS) y no por inflación, al ser el menor de los dos indicadores. Desde 2021, el coeficiente se utiliza para la actualización de las cuotas para los diferentes créditos que se enmarcan dentro del Programa Federal Casa Propia y Procrear II.
De acuerdo con información suministrada por el Ministerio de Desarrollo Territorial y Hábitat, esta fórmula promueve “una mayor estabilidad en la actualización de las cuotas, ya que contribuye a morigerar el impacto de eventuales hitos en la evolución de los salario”.